Urique: Un Oasis entre las sierras (estación Bauichivo del Chepe)
Publicado el 23 diciembre, 2010
Llegamos a la estación Bauichivo del Chepe alrededor de las 14:30hrs y el sol no dejaba de recordarlo. Al bajar del tren una combi y un camión esperaban la llegada de los turistas ofreciendo viajes a Cerocahui y Urique (a 10km y 54km respectivamente). El principal atractivo de la zona es el mirador al cañón de Urique ubicado en el Cerro del Gallego, como a mitad de camino entre ambos lugares. La mayoría de los viajeros suele hospedarse en Cerocahui y desde ahí hacer un tour hasta el mirador. Nosotros preferimos seguir directamente hasta Urique cuando el chofer ofreció hacer una breve parada en el mirador del Gallego. El camino de 2 horas de terracería hasta dicho cerro (pasando por Cerocahui y Mesa de Arturo) está rodeado de bosque de pinos y encinos que hacen el viaje más agradable.
Cerro del Gallego: mirador al cañón de Urique
Llegamos al lugar al atardecer y la vista era sorprendente. Una barranca de casi 2000 metros de altura y en medio un hermoso río que bordea el pueblo de Urique. El sol generaba sombras sobre las vertientes de las diferentes montañas en tonos naranjas y rojizos. Sin duda es la mejor vista a las barrancas de la sierra tarahumara (mucho mejor que Divisadero). Luego de las infaltables fotos, volvimos al camión y comenzamos el descenso hasta el pequeño pueblo de Urique: diez kilómetros de serpenteante camino a un lado del precipicio.
Urique
Llegamos al pueblo ya de noche y el destino (no creo en las casualidades) nos llevó a platicar con un grupo de viajeros alemanes e israelíes que venían en el camión con nosotros. Como no teníamos hospedaje, decidimos ir al hotel donde iban ellos, en las afueras del pueblo (5 minutos caminando).
Una gran sorpresa nos llevamos al llegar al hostal “Entre Amigos”: un pequeño paraíso de árboles frutales, terrazas de cultivo y hermosas construcciones. Kiff, un gringo de unos 70 años, es el amable dueño del lugar. Desde que llegamos nos ubicó en las habitaciones y nos aclaró que podíamos comer todo lo que quisiéramos del lugar. Con una clara visión de sustentabilidad, el lugar cuenta con baños secos composteros, hortalizas y árboles frutales libres de químicos, calentador de agua a leña, separación de residuos y producción de composta. Las confortables construcciones combinan piedra, madera y adobe. El lugar tiene una comodísima cocina para el uso de los huéspedes, computadora con Internet y una amplia biblioteca.
Una gran alegría me invadió al caminar entre papayas, toronjas, albahacas, cebollas y poder ir al baño sin contaminar unos 10 litros de agua en cada jalada. Cosechar ejotes para la comida, saborear el jugo de toronjas recién exprimido en la mañana y estar rodeado de altísimas montañas hacen de Entre Amigos un lugar inolvidable.
A la mañana siguiente salimos a caminar por el río acompañados del grupo de alemanes. Bordeando el hermoso río fuimos encontrando diferentes paisajes, que iban apareciendo detrás de cada curva: partes más anchas con puentes colgantes, vacas, pequeñas casitas escondidas, burros pastando e innumerables formaciones rocosas ideales para imagen de postal. Los altísimos cactus completaban el bellísimo paisaje. Un chapuzón en el agua fresca del río alivianó el calor que el sol del mediodía imponía. Cabe mencionar que era casi el comienzo del invierno y en verano la temperatura llega a 50°C ya que Urique se encuentra a sólo 600msnm. Recomendamos llevar agua y algo de comida para un tranquilo picnic junto al río. Tener en cuenta que el sol se oculta tras las montañas más de una hora antes de anochecer.
Regresamos al pequeño pueblo de sólo 1500 habitantes para conocer un poco y hacer unas compras para la cena. En sí, el pueblo no tiene nada muy interesante, excepto el levantar la cabeza y encontrarse rodeado de inmensas barrancas.
Disfrutamos de la convivencia con otros viajeros cenando, jugando cartas y ping pong. La noche colmada de estrellas y un clima muy agradable invitaba a disfrutar al aire libre bajo la luz de la luna.
Decidimos quedarnos un día más en este tranquilo lugar para descansar en la naturaleza. Cocinar con ingredientes del huerto, leer un libro bajo un árbol, platicar con Kiff acerca del lugar y mirar los cerros fueron las agitadas actividades del día.
A la mañana siguiente tomamos el camión a Bauichivo a las 8am (único del día) para continuar camino en el Chepe hacia El Fuerte, Sinaloa. Bauichivo es un pequeño pueblo con poco encanto. Hay diversos hoteles y restaurantes económicos.
Algunos datos
Camión Bauichivo/Urique (54km – 3 horas)
Sólo 1 servicio por día: Bauichivo/Urique 14:30hrs – Urique/Bauichivo 8hrs.
Hostal Entre Amigos
Dormitorios, habitaciones privadas y camping
¡Cosecha libre!
www.amongamigos.com
No hay cajero (ATM) en el pueblo
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